Las obras de ampliación de la carretera La Paz-Pichilingue, realizadas por la Secretaría de Comunicaciones y Transportes (SCT), causaron daños a un manglar colindante al Área de Protección de Flora y Fauna de Balandra.
En el documento que presentó a la Dirección de Impacto y Riesgo Ambiental (DGIRA), la dependencia federal justificó las obras porque el intenso y pesado tráfico de la zona es un peligro para que accidentes vehiculares ocurra, por lo que el Gobierno de Baja California Sur a través del Centro SCT las modificaciones.
El 31 de julio de 2018, la SEMARNAT resolvió entregar la autorización condicionada del proyecto Manifestación de Impacto Ambiental modalidad Regional del Ramal Pichilingue. El ancho de la pavimento variará debido a la presencia de manglares a un costado de la carretera-
“Por su ubicación respecto al sitio RAMSAR denominado “Humedales Mogote – Ensenada de La Paz” y colindancia con algunos de los manglares de este humedal costero (Enfermería, Eréndira, Puerto Gato, El Tesoro, Bahía Falsa y Pichilingue) el diseño del proyecto tiene la finalidad de no afectar individuos de manglar”, explicó la SCT.
La dependencia gubernamental, sin embargo, explicó que en los km 9+260 al km 16+960 se necesitará un cambio de uso de suelo de los terrenos, porque contienen matorral sarcocrasicaule y vegetación halófila.
Según fuentes consultadas por El Organismo, las piedras serían colocadas sobre un área ya afectada, del otro lado del camino, pero la dependencia parece desobedecer. A los denunciantes anónimos les preocupa que ocasionen afectaciones irreversibles en los manglares cercanos-
La importancia de estos ecosistemas está reconocida por el gobierno mexicano, a través de las Normas Oficiales Mexicanas (NOM) 022-SEMARNAT-2003 y 059-SEMARNAT-2010. Los beneficios o servicios ecosistémicos de un manglar son variados: la alta absorción de dióxido de carbono; son refugio de juveniles especies de importancia productiva; es zona de refugio de aves mugratorias; filtran los contaminantes del agua para que no vayan a mar abierto; son barrera de protección contra tormentas y huracanes, entre otros.
La NOM-022-SEMARNAT-2003 establece las especificaciones para la preservación, conservación y aprovechamiento sustentable y restauración de los humedales costeros en zonas de manglar.
La construcción de vías de comunicación aledañas, colindantes o paralelas al flujo del humedal costero, deberá incluir drenes y alcantarillas que permitan el libre flujo del agua y de luz. Se deberá dejar una franja de protección de 100 m (cien metros) como mínimo la cual se medirá a partir del límite del derecho de vía al límite de la comunidad vegetal, y los taludes recubiertos con vegetación nativa que garanticen su estabilidad.
Apartado 4.14 de la NOM-022-SEMARNAT-2003
La NOM-059-SEMARNAT-2010 se lee que las cuatro especies (Rhizophora mangle; Laguncularia racemosa; Avicennia germinans y Conocarpus erectus) están sujetas a protección especial por la autoridad ambiental.
“Desde hace tiempo esta carretera resulta insuficiente, tanto por la carga que abastece al estado como el turismo o los locales que acuden a las playas. Además del flujo de carga y pasaje, esta carretera conduce a las mejores playas del estado, por lo tanto, a diario y sobre todo los fines de semana, registra un tráfico que se hace denso por el número de vehículos”, justificó el Centro SCT en BCS.
Justamente, en el área de Pinchilingue se proyecta inversiones del ramo inmobiliario, así como una central de generación eléctrica de una empresa privada que producirá energía con gas natural.