Según la Comisión Nacional del Agua (Conagua) Baja California Sur estaría entre los afectados con sequía que va de lo anormalmente seca a sequía extrema, por lo que se implementarán medidas para éste y otros estados que presenten disminución en el abastecimiento de agua o incluso casos más críticos.

Esto de acuerdo al Diario Oficial de la federación (DOF) que publicó el «Acuerdo de inicio de emergencia por ocurrencia de sequía severa, extrema o excepcional en cuencas para el año 2022». En el que se anuncia que se limitará temporalmente el derecho al agua, mediante reducciones en los lugares determinador por el Monitor de Sequía de México (MSM).

Lo anterior supuestamente para garantizar el reparto tanto en zonas rurales y urbanas, donde de hecho ya era escaso o a veces nulo.

No es la excepción Baja California Sur, naturalmente. El 77.7 por ciento de los estados del Noroeste y el Pacífico presentan sequía moderada o extrema. Recuérdese la crisis totalmente vigente en Ensenada, y la de los estados como Nuevo León, Sonora, Sinaloa y Chihuahua.

En estos tres últimos se implementó el programa de siembra de nubes, que según los informes ayudará sobremanera a combatir la sequía y la mortandad del ganado.

Esta en el aire la moneda de las desaladoras que el gobernador Víctor Castro Cosío presentó en declaraciones como una opción, admitiendo además de que lo ha discutido con científicos y ambientalistas que consideran esa alternativa como la última imaginable, dado el impacto que tienen en el mar por efectos los residuos del proceso de desalación.