Desde 1991 se lleva a cabo la conferencia mundial sobre el agua para desarrollar soluciones a los problemas correspondientes al agua y su consumo.

Este año, la World Water Week (Semana Mundial por el Agua) tiene lugar en Estocolmo, Suecia del 23 de agosto al 1 de septiembre y el tema central es “Ver lo invisible: el valor del agua”. México llega a este encuentro en medio de una crisis de escasez de agua y en específico el estado de Baja California Sur tiene las alertas encendidas, pues es el segundo estado con menor disponibilidad de agua renovable por entidad federativa, después de Baja California, de acuerdo al reporte 2020 de la Secretaría de Medio Ambiente y Recursos Naturales (Semarnat).

La disponibilidad de agua renovable significa la cantidad de agua que se puede explotar sin alterar el ecosistema. La renovación de este elemento se lleva a cabo a través del agua de lluvia que se filtra en el subsuelo.

Quienes vivimos en este estado sabemos de las pocas lluvias que caen durante el año, y la situación es aún más alarmante al conocer que de esas precipitaciones sólo el 6.3% se filtra al subsuelo para recargar los acuíferos de los cuales nos abastecemos para nuestras actividades diarias, de acuerdo al reporte Atlas del Agua en México (2016).

El resto del agua se evapora y regresa a la atmósfera (72.5%) y se escurre por ríos y arroyos (21.2%).

El valor de lo invisible

Precisamente sobre ese pequeño porcentaje que se filtra a los acuíferos se centra la conferencia de este año. El agua que no vemos, la que está debajo de nosotros, es la que puede salvarnos.

Antes de proponer soluciones, la organización de la conferencia ha puesto sobre la mesa tres valores relacionados al agua: el valor del agua para las personas y el desarrollo, el valor financiero y económico del agua y el valor del agua para la naturaleza y el clima.

Sobre la primera idea, la conferencia ofrecerá sesiones dedicadas a soluciones que ya se han puesto en marcha para enfrentar la crisis alimentaria de las zonas más áridas del planeta, por ejemplo, retener la humedad del suelo o aprovechar la evaporación.

 En el discurso de inauguración, el escritor islandés Andri Snaer Magnason dijo “¿cómo es posible hablar de algo que es tan grande que rebasa casi cualquier metáfora y comparación que tenemos disponible?

 Eso es parte esencial del problema. La escasez del agua y su impacto en nuestra vida es tan grande que no alcanzamos a reaccionar inmediatamente. Es como estar maravillados con un atardecer en la playa al mismo tiempo que se eleva una ola, poco a poco sin detenerse. ¿Nos quedamos admirando los colores que nos regala el atardecer o corremos para salvar nuestra vida?

La ola de la escasez de agua lleva varios metros de elevación y correr ya no es posible es momento de ponernos de acuerdo para saber cómo recibirla con el menor daño posible.

Para mayor información de la conferencia mundial y de las actividades: https://worldwaterweek.org/