Así como en aquel lejano 9 de diciembre de 1974 se decidiera la denominación de origen del agave tequilana weber variedad azul con el que se hace –o debería hacerse– una conocida bebida llamada tequila, el gobierno de Baja California Sur comenzó las gestiones para lograr la denominación de origen de la Damiana, una planta considerada afrodisíaca desde hace siglos y con la que se elabora, entre otras cosas, el suave licor choyero.

El distintivo de denominación de origen incrementaría su valor en el mercado, de provecho tanto para la imagen del estado como para los productores de la planta, según dijo el titular de la Secretaría de Pesca, Acuacultura y Desarrollo Agropecuario (SEPADA).

Ya saltan nombres como el de la comunidad de La Trinidad, en Los Cabos, «una zona que posee gran potencial de desarrollo para los cultivos de Damiana, chile chiltepín y orégano, debido a que las plantas nacen en el agostadero y se cosechan de manera rústica».

Al parecer es una cuestión de tiempo, pero la estrategia de desarrollo de mercado para este producto endémico de Sudcalifornia ya está planteada y esperemos que con esta novedad se promueva el conocimiento de lo que está alrededor de la Damiana, como lo es la vida rural y su historia, por mencionar sólo un par de cosas.

Entre las empresas que ya producen el licor derivado de esta planta, se encuentra el Grupo Arari de Baja California Sur, de Ana María Ramírez Ornelas (química bacterióloga parasitóloga) que en 2016 producía hasta 4 mil litros de licor de Damiana y contaba con una parcela de 1500 plantas cultivadas al año.

Se dice que el nombre de la planta lo habría puesto el propio misionero Juan María de Salvatierra, en honor del antiguo patrón de la farmacéutica del siglo XI, Pietro Damiani. Pero más importante que las erudiciones librescas está el uso que durante tanto tiempo se le ha dado para diversos fines en la vida cotidiana del sudcaliforniano, y que con el tiempo se va opacando.

Por ejemplo, para combatir la apatía, el cansancio físico y mental, el estreñimiento, la lentitud psíquica que suele presentarse en áridas regiones de la Baja California (Sur) en los días de julio y agosto sobre todo. También es considerada como un excitante sexual, comparable a la testosterona debido a sus alcaloides, pero incluso se ha usado para que los niños dejen de orinarse en la cama. Y para elaborar licor, por supuesto, principal objetivo de la potencial denominación de origen.