Agregó que en caso de hallar contaminantes en los pozos, estos dejarían de operar hasta encontrar una solución.

Respecto a los datos que aparecieron recientemente en algunos medios de comunicación sobre la cantidad de arsénico en el agua de la comunidad de Los Planes, Baja California Sur, la presidenta municipal Milena Quiroga afirmó que se realiza un monitoreo continuo del agua que se lleva a los paceños y que revisarán el caso en cuestión, el cual fue presentado después de un estudio a nivel nacional.

Aseguró que la calidad del agua se revisa desde la salida del pozo y cloración, hasta su entrega, y que según las muestras hasta ahora analizadas el nivel de sustancias nocivas está bajo control. Aunque admitió que en su momento hubo pozos que tenían una cantidad de arsénico por arriba de lo permitido, en zonas como Chametla y El Centenario, para lo cual se instaló una planta potabilizadora.

Agregó que en caso de hallar contaminantes en los pozos, estos dejarían de operar hasta encontrar una solución.

La investigación fue elaborada por Data Crítica y Quinto Elemento Lab, donde se encontró que la media península está entre los estados más afectados en nivel de arsénico, y relacionó su ingesta a través del agua con diferentes tipos de cáncer y diabetes, entre otras. Un estudio que observó muestras de 2012 a 2019.

El estudio pone sobre la mesa un par de cuestiones añejas en la región. Una de ellas es la extracción minera en la zona, de 1784 a 1984, con importantes intermitencias, y que abona a la causa de no permitir el establecimiento de empresas mineras a cielo abierto que repercutirían directamente en la calidad del agua, pero de manera letal.

La otra cuestión es que el norte y centro del país, al estar sobre un eje volcánico, presentan de por sí una cantidad alta de arsénico. Y la tercera cuestión es la manera en que el agua se va modificando en el proceso de su explotación. Ya que los pozos operan a todas horas para nuestra necesidad de energía, y tanto el tipo de pozo como las grandes distancias que recorre por redes subterráneas tienen un impacto en la salubridad del agua.