La empresa Amero-Isatek ofrece comprarle al gobierno encabezado por Andrés López Obrador el avión presidencial. Ofrece un terreno de 1,400 hectáreas con 6 kilómetros de playas en Cabo Pulmo, con valor de 280 millones de dólares, así como 130 millones de dólares en criptomonedas.

Alonso Jiménez, director de la empresa regiomontana, ofreció comprar el Boeing 787 y ponerlo al servicio de la Secretaría de Relaciones Exteriores, con la finalidad de traer inversionistas a México.

La empresa de Monterrey saltó a los titulares de los medios de comunicación, cuando formalizó la operación inmobiliaria más grande de la historia con monedas digitales, cuando compró la playa a un costado del Parque Nacional Cabo Pulmo. El Economista informó de la transacción de 17 millones 733 mil Ameros. Actualmente, dijo el directivo a El Universal, tiene un valor de 175 millones de dólares.

Además, en 2019 compró de la misma forma isla San José, misma que mide 182.96 Kilómetros cuadrados de superficie frente a la Península de Baja California.

Luego de la polémica en torno a la rifa propuesta por el mandatario nacional, surgió la propuesta  de la compañía representada por Jiménez para conseguir los 127 millones de dólares que cuesta el avión, compra aprobada en el gobierno de Felipe Calderón Hinojosa, pero que con Enrique Peña Nieto sufrió unas modificaciones que elevaron su precia a 200 millones de dólares.

Para el Gobierno de México, mantener la ostentosa aeronave representa un gran gasto y deshacerse de él es una promesa que hizo en campaña López Obrador.

 Amero es un Stablecoin que respalda su moneda digital con activos físicos de 60 mil millones de dólares, entre ellos una isla, la playa en Cabo Pulmo y 80 mil hectáreas de minas de oro, plata y platino en Guerrero.

Con información de El Economista, Radiofórmula, El Universal y SDP Noticias