Nuevas acusaciones de tortura contra policías de Baja California Sur (BCS) se acumulan en el caso de homicidio de José Arredondo, ocurrido en Los Cabos y dado a conocer el 16 de julio del presente año. De acuerdo con investigaciones de Animal Político, los presuntos testigos involucrados por la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) fueron obligados y amenazados de muerte por agentes sudcalifonianos para cerrar el caso inculpando a Roberto Guadalupe González Martínez. 

El antiguo gerente del Gastro Bar by Martin Berasategui, restaurante de San José del Cabo (SJC), a quien Animal Político llama sólo José, asegura que él, su hijo y un primo fueron golpeados en dependencias de la PGJE para inculpar a González Martínez del asesinato del empresario José Arredondo, quien era conocido por poseer empresas automotrices y ser padre de Samuel Kim, un cantante de K-Pop. 

Primero, Animal Político tuvo acceso a las declaraciones de Roberto Guadalupe González Martínez, en prisión desde el 27 de julio, así como de su primo, Jesús Enrique Martínez, y del guardia de seguridad del condominio Las Gardenias, donde fue asesinada la víctima. Los 3 testificaron ante el juez de control de Los Cabos, en la audiencia de prueba anticipada que tuvo lugar el lunes 7 de octubre, y aseguraron haber sido golpeados, privados de su libertad, torturados y amenazados de muerte por policías estatales.  

Ahora, este medio accedió a estos 3 nuevos testimonios, los del exgerente y sus 2 familiares, obtenidos por Jaime Salomón Tacher Urbina, abogado defensor de González Martínez. De acuerdo con Animal Político, en las declaraciones se describe cómo los agentes sudcalifornianos utilizan diversas técnicas de tortura, donde sobresale el ahogamiento con bolsas de plástico y agua, para obligar a José a declarar contra el presunto homicida. Los declarantes hablan de una furgoneta blanca sin placas, 4 uniformados que se identifican como agentes ministeriales y sesiones de golpes y preguntas en instalaciones oficiales de la PGJE. Tacher Urbina anuncia que presentará denuncias contra la PGJE por tortura y amenazas en el transcurso de las próximas 2 semanas.  

“Me subieron a fuerza a la camioneta, no traían una orden ni nada”, dice el exgerente, José, detenido el 2 de agosto. “Me empezaron a pegar, me decían que iba a morir, que tenía que confesar. De ahí me llevaron a un cuarto donde está la policía judicial. Me taparon, me hincaron, me pusieron una bolsa en la cara, me repetían que me echara la culpa, que yo tuve que ver en el caso de José Arredondo y que atestiguara que el culpable era el de la cárcel […] Casi me muero, en dos ocasiones no reaccionaba. Después, cuando me pusieron la bolsa me pusieron un cuchillo en la pierna, no me penetraron, sólo que me iban a enterrar. Veían que no me asustaba, me tiraban al suelo. Me pusieron un trapo en la boca y me empezaron a echar agua por la nariz, mientras me pegaban en el estómago para que respirara agua y me ahogara”, dijo. 

El ministerio público tiene hasta el 27 de enero para armar el caso. En ese momento se decidirá si se vincula definitivamente a proceso a González Martínez. De ser asía, se abren 15 días hábiles para que las partes preparen el juicio. BCS, la tierra del “mejor futuro”, registró 128 asesinatos entre enero y septiembre de este año, de un total de 28 mil 326 homicidios en toda la república, según datos del Centro Nacional de Información. Además, se notificaron 2 denuncias por secuestro.