El intento de feminicidio de Julio Rodríguez contra Valeria “N”, que la dejó en estado crítico, ocasionó la rabia de familiares y amistades que marcharon hacia las oficinas de la Procuraduría General de Justicia del Estado (PGJE) en Guerrero Negro.

Valeria es una joven madre que fue agredida severamente por su pareja. Sus familiares evidenciaron el atroz hecho y describieron la manera en que Julio, con pistola en mano, la trasladó a otra ubicación donde la golpeó e inclusive, narraron, le echó encima el vehículo que conducía. Después la recogió y la trasladó a una casa cercana donde la abandonó. Ella buscó ayuda, siendo trasladada a la Clínica Número 5 del IMSS, con lesiones que ponen en riesgo su vida.

Unas 20 personas caminaron a la dependencia de justicia estatal, esperando una respuesta, esperando justicia por Valeria. Cuando llegaron a la oficina lanzaban consignas en apoyo de la mujer lastimada a manos de Julio. Exigieron que la autoridad estatal detenga al abusador y le preguntaron al gobernador Carlos Mendoza Davis: “¿Dónde está, gobernador?”.

“Huevos te faltaron Julio. Hombre no es tratar mal a una mujer”, se escuchó de pronto de una mujer visiblemente enojada, entre las y los manifestantes. Luego comenzaban los gritos de “Julio preso” y “Julio cobarde”.

En cierto momento, ante la falta de respuesta de la oficina, comenzaron los reclamos contra los funcionarios en turno, quienes no quisieron salir a recibir la denuncia de las personas que salieron porque “Valeria se debate entre la vida y la muerte”.

 Caminarán de nueva cuenta por Valeria porque su exigencia de justicia apenas comienza.  

Mañana volverán a salir