A unos cuantos días del anuncio del “cierre” de las fronteras municipales para seguir “limpios” del COVID-19, Mulegé registró el primer caso en la Delegación de Guerrero Negro, en la que se ubica Exportadora de Sal.

Una persona de 50 años que resultó ser un caso importado y actualmente estable. La noticia causó miedo y paranoia en muchos de los habitantes de aquella región, por lo que el médico  negroguerrerense, Sergio Beltrán, publicó un pequeño texto para no caer en pánico.

El doctor escribió que el 70% de los casos en México son estables y ambulatorios. El recién nombrado SARS-CoV2, actualmente ha contagiado a 155 personas en Baja California Sur, son 5 las muertes que dejó tras de sí la enfermedad y solo uno se recuperó.

Aclaró que este caso es importado y, con base a la historia natural de la enfermedad, entró por el paralelo 28 antes de que se impusieran las medidas actuales de restricción, dijo, quizá pasó asintomático, pero como portador en ese momento.

Hay que recordar que sin anuencia del Cabildo, el alcalde Felipe Prado decidió cerrar el municipio de Mulegé a tránsito vehicular, porque en dicha demarcación no hay ningún enfermo confirmado por COVID-19.