Trabajadores de la empresa Getermex en Loreto, Baja California Sur, han iniciado una huelga debido a presuntas violaciones a sus derechos laborales como seguridad social, pago de horas extras y aguinaldos.

Alejandro Ruiz Romero, representante del Sindicato de Trabajadores y Empleados de la Industria Metalúrgica, Construcción, Transportes Similares y Conexos de la República Mexicana acusó a la empresa de incumplir con pagos desde 2024.

“El patrón nos paró, nos descansó desde noviembre. Ya no nos pagó las semanas de los trabajadores, las horas extras, los aguinaldos, nada”, dijo uno de los trabajadores al diario El Sudcaliforniano.

A pesar de las convocatorias de las autoridades laborales, los representantes de Getermex no han comparecido para abordar la situación.

La huelga ha sido declarada legal y se desarrolla de manera ordenada, con los trabajadores exigiendo el cumplimiento de sus derechos laborales y el pago de salarios atrasados.

Getermex busca desarrollar proyectos relacionado con la energía geotérmica del calor interno de la Tierra o de corriente marinas en el fondo marino. Principalmente usada para producir energía eléctrica.

A continuación el pronunciamiento del sindicat:

“Frente Sindical de Trabajadores Empleados de la Industria Metalúrgica, Construcción, Transportes, Similares y Conexos de la República Mexicana.
Desde el pasado mes de diciembre de dos mil veinticuatro, el Tribunal Laboral de este Partido Judicial de La Paz, Baja California Sur, declaró existente la huelga solicitada por el Frente Sindical de Trabajadores Empleados de la Industria Metalúrgica, Construcción, Transportes, Similares y Conexos de la República Mexicana, en favor de trabajadores loretanos, laborando en San Juan Londó, municipio de Loreto.
​Aun cuando los trabajadores iniciaron sus labores desde el mes de julio del año pasado, carecían de los elementos que se establecen como necesarios para el desarrollo de sus jornadas, en las normas oficiales mexicanas en materia de seguridad, salud y medio ambiente de trabajo, así como lo que señala la Ley Federal del Trabajo, pues no se les proporcionó la vestimenta y herramientas adecuadas para efectuar trabajos de excavación en temperaturas que oscilaban hasta los 50 grados centígrados, así como diversas necesidades como contar con estación de agua, que se requería dadas las condiciones en que se prestaba el servicio.
​Además, la patronal también dejó de cumplir con sus obligaciones de pago, lo cual se postergó hasta el mes de diciembre, lo que provocó que los trabajadores no recibieran la liquidación de sus prestaciones de ley, como lo es el aguinaldo.
​Dichas faltas en las que incurrieron la Sociedad de Abogados Consultores y Estudios Socioeconómicos, sociedad civil, y/o la empresa denominada Getermex, como responsables de la fuente de trabajo, motivaron que el sindicato representante de la fuerza obrera acudiera ante las autoridades competentes a solicitar el emplazamiento a huelga y lograr la firma del contrato colectivo.
​Sin embargo, ni los patrones ni sus representantes se han acercado a cumplir con los mandatos de ley, pues no obstante que la Juez del Tribunal Laboral con sede en La Paz, declaró la suspensión de labores y la existencia de la huelga, lo cierto es que hasta la fecha sigue sin resolverse el conflicto motivo de la misma.
Los trabajadores loretanos siguen sin percibir sus salarios, y mientras ello siga ocurriendo, se seguirán ofendiendo los derechos de la sociedad, pues se han empleado todos los medios previstos por la ley para lograr una negociación colectiva, y la base trabajadora loretana sigue sin ser escuchada y respetada en sus derechos más esenciales, protegidos por la Ley Federal del Trabajo.
Las personas que fungen como patrones dicen buscar el fortalecimiento de la economía local, así como desarrollar un futuro sostenible para todos, pero en este caso, no cabe duda que se encuentran desconociendo el trabajo diario y jornadas extras que se han estado llevando a cabo en meses anteriores, en detrimento total de los trabajadores, lo que lejos de fortalecer la economía del municipio, propicia el despliegue de proyectos que finalmente resultan inequitativos, y que generan desconfianza para la fuerza trabajadora local, amenazada y castigada por quienes se encuentran al mando de proyectos con intereses extranjeros, con metas unilaterales que dejan de lado los derechos de nuestros trabajadores locales, que hasta la fecha siguen buscando justicia.”