Felipe Morales Ramírez, vocero de la organización ciudadana Frente Ciudadano en Defensa del Agua y la Vida, que por años ha protagonizado la lucha contra la aprobación del proyecto minero Los Cardones en la Reserva de la Biósfera Sierra de la Laguna, celebró que el gobierno mexicano otorgara la administración del terreno nacional Jesús María a la Comisión Nacional de Áreas Naturales Protegidas (Conanp), el cual era indispensable para que la empresa Desarrollos Zapal, de Invecture Group, instalara una mina a cielo abierto para extraer oro. Sin embargo, esto no es suficiente para acabar con la amenaza, dejó ver el activista, sino la cancelación definitiva de toda concesión minera en zonas protegidas. 

“Estamos en pie de lucha ante este tipo de fenómeno: el extractivismo”, dijo Morales Ramírez. “La lucha continúa, la defensa de la Sierra de la Laguna continúa, puesto que las concesiones mineras tienen una vida de 50 años y son prorrogables otros 50 años más […] No habrá cuarta transformación si no se cancelan las concesiones mineras, puesto que lo que está en riesgo es el agua, lo que está en riesgo es el recurso más importante para el desarrollo y bienestar de los sudcalifornianos”.

Así lo señaló el vocero del Frente Ciudadano en Defensa del Agua y la Vida al tomar la palabra en la conferencia de prensa que ofrecieran el director regional de la Conanp, Benito Bermúdez Almada, y el superdelegado del Gobierno de México en el estado, Víctor Castro Cosío, para dar a conocer el destino del predio Jesús María. En su oportunidad, hizo un llamado al presidente de la república para escuchar la demanda de los sudcalifornianos y avanzar en el litigio por el predio El Encantado, amenazado también por Desarrollos Zapal en Sierra de la Laguna.

Felipe Morales Ramírez

“Desde el Frente en Defensa del Agua y la Vida, en voz de la ciudadanía, que arropa, cobija y acompaña este movimiento sudcaliforniano, hacemos una demanda ciudadana a Andrés Manuel López Obrador […], un atento llamado, respetuoso, para que los predios de El Encantado también sean puestos en la misma categoría […] Hay una deuda pendiente”.