Carlos Rochín Álvarez dirigente del PAN en Baja California Sur criticó “la pasividad” del gobierno de la Ciudad de México tras las recientes manifestaciones de mujeres.

Acusó que comenzó como una manifestación “legítima”, no obstante cree que terminó en hechos lamentables refiriéndose a la pinta de monumentos.

Subrayó que hubo complicidad de las autoridades que “brillaron por su ausencia” y llamó a las manifestaciones de feministas “una jornada de terror para la mitad de la Ciudad de México”.

Para el dirigente del PAN la marcha se resumió en  agresiones a la prensa y atentados contra “bienes de la nación” y la propiedad privada.

Remató al decir que permitir esta marcha no fue dar pie a la libertad de expresión sino que significó la ausencia de la autoridad.

El presidente del PAN jamás mencionó a ninguna de las 17 mujeres asesinadas durante los tres días siguientes a la manifestación. Tampoco expuso ninguna de las problemáticas que empujaron a las activistas a salir a la calle a protestar.