La Comisión Federal de Electricidad pidió publicar en medios nacionales que era falso que la contaminación en el municipio de La Paz tenga su origen en la Central Termoeléctrica Punta Prieta y en la Central de Combustión Interna Baja California Sur de la Comisión Federal de Electricidad (CFE). Sin embargo, las asociaciones civiles no insisten en tener otros datos: el 92 % de la contaminación del aire en el estado proviene de la CFE.

Todo comenzó cuando el director de “comunicación corporativa” de la paraestatal, Luis Bravo Navarro hizo llegar una nota aclaratoria a Excélsior donde afirma que ambas centrales cumplen estrictamente con los límites permisibles establecidos por la normatividad en materia ambiental.

“Actualmente, ambas centrales generadoras cuentan con Sistemas de Control implementados para mitigar la concentración de emisiones a la atmósfera, los cuales se mantienen en operación continua” expresó en la carta publicada en su integridad en la versión impresa de dicho medio.

La empresa “de clase mundial” llegó a afirmar que tienen sistemas especiales que reducen las concentraciones de emisiones como las partículas suspendidas totales, y los óxidos de azufre.

CFE informó que Punta Prieta emite 44 mg/m3. que, consideran, está “muy por debajo” del límite máximo establecido en la NOM 085 SEMARNAT-2011 (350 mg/m3).

Además, comunicaron que la CCI “Baja California Sur”, cuenta con un Sistema de Control de Emisiones con base en la dosificación de aditivos para la combustión de las cinco unidades de generación que operan con diesel, las cuales cuentan con las licencias ambientales respectivas.

Ahí, la emisión de óxidos de nitrógeno fue reportada como de “900 a 1,082 ppm, los cuales se encuentran por debajo del límite establecido en la Licencia Ambiental Única de 2,000 ppm”, pero no informan sobre contaminantes como el óxido de azufre.

CFE añadió que mantiene en operación “un sistema de monitoreo continuo de la calidad del aire” cuyos resultados son compartidos a la autoridad ambiental, mismos que “demuestran el cumplimiento con la normativa en materia de salud”.

Finalmente, el funcionario de la CFE afirmó que ya se trabaja para que la operación de CFE esté basada en Gas Natural; tecnología que, informan, “utilizará como combustible principal gas licuado regasificado y que iniciará operaciones en 2024”. 

Organizaciones insisten

Ante los dichos de CFE, el conjunto de organizaciones de la sociedad civil que cabildea la entrada de empresas “verdes” a generar por la CFE en BCS expuso a CFE.

Las organizaciones Centro Mexicano de Derecho Ambiental, A.C. (CEMDA) y el Centro de Energía Renovable y Calidad de Aire, A.C. (CERCA), llamaron a la Comisión Federal de Electricidad (CFE) para que rectifique lo manifestado en el diario Excélsior donde afirmaron que las centrales de generación de energía en la ciudad de La Paz, B.C.S, “no contribuyen a la contaminación del aire” y “cumplen estrictamente con los límites establecidos por la normatividad”.

“Los datos que expone la CFE no cuentan con la fundamentación correcta, ya que, para que sea posible analizar tendencias e indicadores de la calidad del aire a través de un sistema de monitoreo, de acuerdo con lo que indica la NOM-156-SEMARNAT-2012, este debe contar con un mínimo de 75% de datos en un año calendario; es decir que, durante al menos 275 días, se tengan mediciones de las cantidades de contaminantes criterio presente en el aire para el promedio anual. Sin embargo, la CFE no ha cumplido con esta norma en varios de los años analizados” señaló la Doctora Jaqueline Valenzuela, directora ejecutiva de CERCA.

Las asociaciones revelaron que el supuesto monitoreo de CFE incumple la metodología de medición que señalan las normas oficiales en la materia, ya que sus registros presentan promedios diarios de emisiones contaminantes, en lugar de promedios horarios lo que impide conocer resultados reales de contaminación atmosférica que afecta a el medioambiente de las y los paceños.

Respecto al llamado un “sistema de control de emisiones”, las asociaciones dijeron tener información que confirma que, de las seis unidades de dicha central solo dos cuentan con dichos sistemas operando.

Las asociaciones dicen contar con información recibida por transparencia que confirma que estos sistemas están fuera de línea por lo menos desde hace cuatro años.  Aún con sistema completo de control de emisiones dichas unidades únicamente limitan la emisión de óxido de nitrógeno (NOx), aclararon.

Mientras, contaminantes como el dióxido de azufre (SO2), ozono (O3) y las partículas PM10 no cuentan con ningún sistema de control.

Las asociaciones remataron con información del Programa de Gestión para Mejorar el Aire del estado de Baja California Sur (Proaire BCS), que vincula las emisiones de CFE como responsables del 92% del total de emisiones del dióxido de azufre (SO2) en la media península.

Ante la evidencia de una alta concentración de sustancias nocivas en el aire de la capital sudcaliforniana, las organizaciones hicieron “un enérgico llamado a la CFE y al gobierno federal a que no ignoren la información existente”.

“Es urgente mejorar los programas de monitoreo de calidad de aire en La Paz con apego a lo que señala la normativa, así como emprender acciones para disminuir la contaminación atmosférica, impulsando una transición energética que aproveche de las fuentes renovables en Baja California Sur”, pidieron.