¿Rubén Muñoz Álvarez mintió para favorecer para beneficiar al desarrollo inmobiliario Al Mar Residencial? La pregunta seguramente es la que se hacen los habitantes de El Manglito e Inalámbrica, quienes al parecer no verán ni el dinero ni el predio donado por la empresa Promotora El Salate SA de CV de Miguel Sánchez Navarro.

Para entenderlo mejor, debemos remontarnos unos meses atrás. Empezaba la pandemia y que mejor pretexto para intentar efectuar una maniobra para que Al Mar Residencia no tuviera que deshacerse de 6,659.580 m2, área calculada y que debió entregar al XVI Ayuntamiento de La Paz para uso de los antiguos habitantes de la zona.

El área de donación viene establecido en la Ley de Desarrollo Urbano de Baja California Sur. Sin embargo, por mandato legal, el alcalde presentaría la oferta de 13 millones de pesos por este pedazo de tierra y así lo propuso a las y los regidores en la XXXII Sesión ordinaria de Cabildo, con el objetivo de palear las dificultades financiera de la municipalidad.

 Aquí es cuando se complicaron los planes de Muñoz Álvarez, porque la gente de El Maglito e Inalámbrica quería un parque que los beneficiara. Una vez aceptado por una parte de cuerpo edilicio, inició una serie de reuniones y prometió a las y los inconformes un parque, pero éste se ubicaría en un terreno en el que estaba las oficinas de Telecom.

“Desde el mes de junio, el alcalde Rubén Muñoz Álvarez, ha estado comunicándonos en diversos espacios y reuniones que dicho predio estaba siendo gestionado por las autoridades locales para que el Instituto de Administración y Avalúos de Bienes Nacionales (INDAABIN) lo donara para ahí construir un parque con un recurso que se obtuvo ante la negativa de la Promotora El Salate de entregar un predio de donación y por el cual pagó más de 13.5MDP al ayuntamiento”

Se lee en un posicionamiento hecho por colonos de El Manglito-Inalámbrica.

Por órdenes de Muñoz Álvarez, el titular de la Dirección de Desarrollo Social, Manuel Cota, se llegó a un acuerdo por el cual se orientaría el 70% de ese recurso para equipar el parque. Esto dio esperanza a la gente, porque por fin tendrían un sitio en el que sus hijos jugarían.

Lamentablemente hoy supieron la verdad. Máquinas de la Secretaría de Marina iniciaron trabajos de desmonte en el predio que tanto “negoció” el munícipe de La Paz. En realidad era una mentira. Los vecinos tienen en su poder un documento que avala la posesión de ese mismo terreno.

“(…) mismo que nos fue entregado por la Secretaría de Marina ante la gestión que hicimos para reunirnos con ellos y en el que se puede constatar que se les otorgó la posesión del predio desde el día 30 de septiembre”.

Ahora, la pregunta que nos surge: ¿dónde está esos 13,5 millones de pesos?