Autoridades mexicanas han encontrado y allanado un recinto en la ciudad de Tapachula, Chiapas, utilizado por una secta judía extremista llamada Lev Tahor (Corazón puro), acusada en Canadá, Estados Unidos e Israel de trata de personas, violación, narcotráfico y otros delitos graves, según informó el medio The Times of Israel.
En el operativo participaron docenas de agentes tanto de las autoridades locales como de trabajadores sociales, luego de que las investigaciones de autoridades mexicanas arrojaran pruebas de que los miembros de la secta estaban implicados en los delitos mencionados.
En el operativo también participó un equipo privado israelí, contratado por familiares de algunos de los miembros. Cabe destacar que muchos de los miembros no han podido escapar de la secta y que otros, que sí lo han logrado, constituyeron un grupo opositor de dicha agrupación llamado Lev Tahor Survivors, quienes calculan que la secta tiene unos 300 integrantes.
En el operativo se logró la detención de 26 miembros, incluidos dos de sus líderes. De ser declarados culpables por la justicia mexicana, podrían enfrentar –algunos de ellos– hasta 20 años de cárcel, y en caso de no ser deportados antes. Otros de los líderes establecidos también en el lugar de la detención, habrían escapado días antes.
En el grupo se encuentran niños, hijos de algunos de los miembros, que están siendo atendidos por las autoridades mexicanas. La mayoría del grupo se niega a regresar a Israel.
La secta fue fundada en los años 80 del siglo pasado por el rabino Shlomo Helbrans en Jerusalén. Lugo huyeron a Canadá, donde las autoridades canadienses les impusieron un extremo escrutinio por presuntos abusos a menores y matrimonio infantil.
Luego de que huyeron a la frontera de México con Guatemala, se dice que el líder Helbrans se ahogó en circunstancias misteriosas y su hijo se hizo cargo de la secta.
A principios de este mes, tres miembros de la secta fueron condenados por un tribunal federal de Estados Unidos por secuestro.