Daniel Gallo lleva 11 años en la presidencia y se ha reelegido cuatro veces

La noche de ayer lunes 10 de enero, el ciudadano Juan Manuel Urquidez Rangel decidió iniciar una huelga de hambre a las afueras de las instalaciones del Poder Judicial, solicitando que el magistrado, presidente del Tribunal de Justicia Estatal, Daniel Gallo, presente su renuncia o sea destituido, luego de ejercer el cargo por 11 años y de haberse reelegido –según sostiene el manifestante y su abogado– de manera irregular.

Urquidez Rangel declara que tras la llegada del magistrado Daniel Gallo los problemas de justicia se agrabaron «a tal grado de que nos daba miedo tocar el tema de la inseguridad».

El manifestante sostiene que jueces se prestaron para realizar una ilegalidad en la que falsificaron documentos de su vivienda. Luego su esposa fallece y él tiene que iniciar un proceso administrativo que era un Juicio Sucesorio Instestamentario. Al término del jucio se le declara heredero universal y albacea de los bienes. Sin embargo, se lleva una sorpresa al encontrar que su casa se encontraba a nombre de otra persona. Denunció, confió en el proceso y al final los jueces no fallan a su favor, de manera indebida, según afirman él y su abogado Arturo Rubio Ruiz.

Las manifestaciones en contra de Daniel Gallo ya se habían dado hace tres años, cuando el magistrado se reeligió, ocasión en que un grupo de inconformes tomaron las calles y colocaron lonas con mensajes de protesta en diferentes juzgados, sin obtener la respuesta deseada por parte de las autoridades.

El manifestante admite tener miedo de las posibles represalias que estas manifestaciones generen, aunque, si bien es cierto que Daniel Gallo entró durante la administración panista, Urquidez Rangel confía en que la situación no será la misma ahora, pues ya ha habido cambio de administración y de «poderes».

Juan Manuel Urquidez Rangel entregó una carta al presidente Andrés Manuel López Obrador en la que comunicaba supuestas anomalías y señalaba la irregularidad de la reelección del magistrado, recordando que debía ser un cargo con una duración de tres años.

Urquidez Rangel, sólo por nombrar algunos ejemplos, dijo estar cansado de que «desaparezcan expedientes completos» o ver gente que pierda su patrimonio al confrontarse a «jueces y magistrados corruptos».

Dijo haber tenido comunicación en solicitud de apoyo con la diputada Marbella González, con la presidenta de la Comisión de Derechos Humanos Eufrosina López Velasco, y con Juan Pérez Cayetano, primer secretario de la Comisión de Derechos Humanos.

Urquidez Rangel hizo una invitación al gobernador Víctor Castro Cosío, para que se presentara una terna de posibles sustitutos del actual presidente del Tribunal, pero que no esté integrada por personas afines a las prácticas que reclama se han venido dando.

El abogado de Juan Manuel Urquidez Rangel, Arturo Rubio Ruiz, solicitó la comparecencia de Daniel Gallo presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado ante el Congreso hace un mes, con motivo de su permanencia en el cargo por once años y que ha sido reelecto por cuatro ocasiones, la última de 2017 hasta 2023. En la mesa directiva del Congreso se dio lectura a su petición.

En ella Rubio Ruiz hace referencia al Artículo 95 de la Constitución Política de la entidad, el cual establece en su párrafo final que el presidente del Tribunal Superior de Justicia del Estado durará en su encargo tres años. «El constituyente estableció la limitación temporal del encargo, para evitar que se formaran cotos de poder y se perpetuara una persona en el encargo».

Así mismo, Rubio Ruiz declaró esta mañana para este medio, que «específicamente la huelga de hambre es un acto de protesta pacífica, ante los actos de autoridad que lesionan derechos fundamentales, como en el caso, el acceso pleno a la justicia y a la autonomía judicial. El primero es un derecho, el segundo, una exigencia cuyo cumplimiento garantiza el acceso pleno a una justicia imparcial, pronta y expedita, lo que no ocurre, ni ocurrirá en BCS, mientras el Tribunal de Justicia esté secuestrado por un sujeto que se aferra al poder y se sostiene en el mismo, detentando inconstitucionalmente la presidencia del Tribunal de Justicia, haciendo de la administración de justicia un asunto de familia, un negocio del grupo que lo impulsó y lo sigue sosteniendo, en franca y descarada burla a la legalidad, la constitucionalidad y el estado de derecho». Al manifestante se le unirán familiares y compañeros en su protesta, sin embargo por ahora será únicamente él quien lleve a cabo la huelga de hambre.